lunes, 3 de noviembre de 2008

Lo Mas Que Vale;La Vida de Tu Hijo.

El perfecto cambio real y verdadero es lo supremo de tu vida.

 n520002728_1405569_8895 El circulante y la moneda de cambio es el tema.

Lo que enfocas se agranda. Estamos enfocados en temas financieros y a nivel cancha parece que cada quien tiene su "moneda" pesos, dólares, euros, liras, libras, soles, yenes, reales, pesetas, colones, sucres, bolívares, etc. y que cada moneda tiene sus denominaciones y pareciera que estamos al pendiente de la fluctuación en los tipos de cambio que aparentemente dan referencia del "valor" de la moneda en cuestión.
Supondría inecesario mencionar lo que circula en el mundo y las noticias hoy día pero aquí voy y seguro te sonará cotidiano: pérdidas, incertidumbre, volatilidad, inseguridad, inestabilidad, estrés, tensión, ansiedad, impaciencia, violencia, enfermedad, desolación, etc., todo esto que circula no son sino diferentes denominaciones de la misma moneda: el miedo.
En el mundo el miedo es el circulante de curso legal que no conoce fronteras, aun con sus distintas denominaciones es la misma moneda en todo el mundo.
Entonces en los periódicos encabezados como "incertidumbre en los mercados financieros", "inestabilidad macroeconónica", "volatilidad..." equivalen a: miedo.
Qué es el miedo sino la falta de amor.
Quieres acabar con las pérdidas, la inestabilidad, la volatilidad... ..¡intercámbialo por el amor de su hijo Jesus!
Un solo problema, una sola solución.
-¿Cómo su Amor puede resolver la inestabilidad macroeconómica?
Simplemente porque su Amor es y punto.
Su Amor no conoce de inestabilidades. Eso no significa que el amor sea ignorante, eso significa sencillamente que el Amor es inmutable, descansa en la certeza y si lo revisas detalladamente lo que más se ha subrayado de esta "crisis mundial" es la incertidumbre.
Y qué es la incertidumbre sino una denominación del miedo y éste último una expresión de una aparente falta de amor.
Regreso al amor. Y siempre regreso al amor porque el amor es lo que me rodea, es lo que me constituye, es lo que soy.
-¿Cómo puedo intercambiar miedo por amor?
Now we are talking!
Pídele ayuda al Espíritu Santo, tu simple disposición de hacer el intercambio es suficiente. El intercambio opera desde el no interferir y dejar que la transferencia la realice el Amor mismo es el que te acompaña, la oscuridad se desvanece ante la luz.
Entonces al pedir ayuda al Espíritu Santo, es como si abrieras una ventanilla, una sucursal, una franquicia de "Casa de Cambio", en la que a tu sonriente ventanilla acudirán miles con sus monedas, listos para que el Espíritu Santo a través tuyo troque miedo en paz, troque miedo en amor, intercambie el miedo por alegría.
-¿Felicidad y paz? ¿No que con el amor era suficiente?

Felicidad y paz son producto y sinónimos del amor, son evidencia de que la moneda que se tiene es el Amor.
Revisémoslo juntos:
Si te dijera que a pesar de los aparentes escenarios cambiantes externos, no hay nada externo a ti, no hay nada fuera de ti.
Su Ser es el Amor mismo y como tal es eterno -no está sujeto a la finitud y por ende no tiene necesidad de ningún afán o esfuerzo de tu parte para preservarse o permanecer.
Al ser tu Ser el Amor mismo con el también es inmutable y no está sujeto a ningún tipo de inestabilidad o cambio.
Al ser tu Ser el Amor mismo es Todo abarcador y por ende rodea todo.
En este reconocimiento, sólo hay espacio para la paz, no hay luchas, afanes, esmeros, todo te es dado, porque tu eres su hijo.
Y si estás en paz y la paz te rodea... entonces ¿acaso no sientes unas tremendas ganas de celebrar, de festejar? es esa felicidad innegable de los enamorados , no pueden reprimir la sonrisa, están embebidos por el Amor.
¿Distingues ahora cómo la paz y la felicidad son frutos y sinónimos del Amor?
Inexplicable y todopoderoso Amor.
Inmutable, eterno y todoabarcador Amor.
Eso soy. ¡wow, este reconocimiento es un deleite sus fuerzas aliento de nuestras vidas!

Gracias Padre.
Gracias.
Estoy listo a para ponerme la camiseta, enfocarme en el Amor y abrir mi sonriente ventanilla de la "casa de cambio" ¡Envíamelos Padre!