miércoles, 16 de marzo de 2011

TU PALABRA ES DEL CIELO


YO SOY JOSE ; Quise hacer una pausa para decirte que te amo y darte las gracias por todo. Estoy pasando un día excelente, y te lo agradezco. Gracias por el sol. Muchas gracias por mi familia. ¡Qué bien me tratas! Todavía me asombro de que te conozca y de que quieras ser mi dueño. Me llenas de dicha y colmas mi ...s días de bendiciones: auténtica satisfacción en mi trabajo y además paz interior, pues sé que lo tienes todo en Tus manos. No me canso de agradecértelo. Me alegra en el alma que sepas la gratitud que siento y que seas consciente de que te amo. Aprecio todo lo que haces por mí.
YO TU PADRE, Sé lo mucho que quieres a tus hijos, que deseas entrañablemente que ellos me conozcan en mucho mayor grado, que se acerquen a Mi corazón. Ese es también Mi deseo. A cada uno le tengo un cariño singular. Atiendo a cada uno de modo especial. Cada uno es a Mis ojos cual tierna planta a la que quiero nutrir y fortificar con Mis Palabras, regar con el rocío de Mi Espíritu, cuidar con ternura y guiar a fin de que crezca bien, que se desarrolle rectaMENTE, alt@, fuerte y san@.
Muchas plagas atacan a Mis tiernas plantas en una tentativa de frustrar los planes que Yo tenía para ell@s. Se ven amenazadas por diversos flagelos y enfermedades, venenos y substancias contaminantes lanzados por el Maligno. Nada de eso proviene de Mí ni de Mi Espíritu, Yo no actúo de esa manera. Son las vertientes del mundo, las vertientes de la muerte.
Con esmero y oración nutre, atiende y ama a Mis plantitas. Vela por ellas con toda el alma. Así crecerán fuertes, sanas y erguidas, y no se verán azotadas por las plagas y enfermedades deL adversario.
El enemigo sabe que tiene poco tiempo. Por eso procura inundar la Tierra con mentiras, contaminación y engaño. Pretende corromper las Aguas de Vida y acabar con lo bueno, lo que me glorifica, lo recto, lo amable y verdadero. No permitas que se marchiten ninguna de las tiernas plantas que he dejado a tu cuidado. No dejes de regarlas, de apagar su sed con las aguas puras de Mis Palabras. Sé como el mayordomo diligente. Si no te cansas de amar, atender y nutrir a estas plantitas, recibirás un generoso galardón desde mi propio plantio disfrutaran del eden una tierra de inocencia paz y amor.