miércoles, 29 de marzo de 2023

Dios Con Nosotros

El Espíritu en la impartición de los Dones de Dios

Unidad y Redención

 En El Cuerpo de Cristo

Él mismo constituyó a unos como apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; y a otros, pastores y maestros,

Efesios 4:11

Los dones espirituales son habilidades especiales que Dios regala a sus hijos para la edificación de su cuw¿erpo la iglesia de la cual cristo es el maestro y su espíritu es el creador universal en toda su obra en el cielo y nuestro planeta tierra. Debemos usarlos para bendecirnos los unos a los otros y así construir juntos una asamblea fuerte en el en su obra redentora que honre a Dios.

Todos los cristianos tenemos por lo menos un don y el Espíritu Santo distribuye los dones según quiere: «Todo esto lo hace un mismo y único Espíritu, quien reparte a cada uno según él lo determina»

 (1 Corintios 12:7-11). Sin embargo, la Biblia nos dice también que podemos anhelar otros dones y nos anima a pedirlos (1 Corintios 12:26-31).

En la Biblia encontramos tres listas principales de dones; Romanos 12:6-8 y Efesios 4:7-13. A continuación aparecen los dones que mencionan esos pasajes junto a una breve definición.

La Biblia dice que se nos otorgan dones espirituales con un propósito. En Romanos 12:8 se nos dice que usemos los diversos dones según el carácter de Dios y Su voluntad revelada "con liberalidad... con solicitud... con alegría". En 1 Corintios 12:24-25 se nos dice que "Dios ordenó el cuerpo, dando más abundante honor al que le faltaba, para que no haya desavenencia en el cuerpo, sino que los miembros todos se preocupen los unos por los otros". En 1 Pedro 4:11 el propósito de los dones es "para que en todo sea Dios glorificado por Jesucristo".

Los dones son dados por el Espíritu de Dios; por lo tanto, los dones son parte de la nueva vida que se nos concede en Cristo y podrían ser totalmente diferentes de nuestras capacidades o anhelos antes de la salvación. Primera de 1 Corintios 12:4-12 explica: "Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo. Y hay diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo. Y hay diversidad de operaciones, pero Dios, que hace todas las cosas en todos, es el mismo. Pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para provecho". Los creyentes podrán diferir en sus dones espirituales, pero todos los dones espirituales están destinados a ser utilizados para la edificación del cuerpo de Cristo y para la gloria de Dios.

Un breve examen de tres textos importantes (Romanos 12:6-12; 1 Corintios 12:4-12; 1 Pedro 4:10-13) nos ayudará a ver el diseño de Dios en relación con Sus dones.

Una de las primeras cosas que se aclara en estos pasajes es la diversidad de los dones. El estudio de Pablo sobre los dones espirituales en Romanos 12 incluye diferentes dones que se encuentran en 1 Corintios 12. Y cuando Pedro habló de los dones espirituales en 1 Pedro 4:7-13, no los especificó, sino que enumeró amplias categorías de las clases de dones que Dios da. Entre los dones enumerados en la Biblia están: profecía, ministrar, sabiduría, conocimiento, fe, sanidad, enseñanza, exhortación, dar, gobernar, mostrar misericordia, hablar en lenguas e interpretar lenguas. Cualquiera que sea el uso específico, cada don encaja con los otros dones, y todos ellos obran juntos entre sí como las partes del cuerpo para hacer de ellos un conjunto funcional (Romanos 12:5).

Al hacer un estudio completo de los dones espirituales, uno debe intentar cuantificar y definir los dones. Romanos 12 enumera al menos siete dones, y 1 Corintios 12 enumera nueve. Hay cierta coincidencia en estas listas, y ciertamente hay indicaciones de que hay más dones de los que se detallan y corren en circulación por la sangre de Cristo en los que cada hombre y mujer de fe experimentan en la asombrosa contemplación de su marravillosa gracia de bendiciones en fe y sabiduria de su palabra .

Pero a cada uno de nosotros se nos ha dado gracia en la medida en que Cristo ha repartido los dones. Por esto dice: «Cuando ascendió a lo alto, se llevó consigo a los cautivos y dio dones a los hombres». ¿Qué quiere decir eso de que «ascendió», sino que también descendió a las regiones bajas de la tierra? El que descendió es el mismo que ascendió por encima de todos los cielos, para llenarlo todo. Él mismo constituyó a unos como apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; y a otros, pastores y maestros, a fin de capacitar al pueblo de Dios para la obra de servicio, para edificar el cuerpo de Cristo. De este modo, todos llegaremos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a una humanidad perfecta que se conforme a la plena estatura de Cristo.

Efesios 4:7-13

El Don de Dios